Llegué a la playa de Oliva cuando una persona estaba esperando ansioso mi llegada junto a un amigo. Yo ya sabía quién era, seguramente el mejor cliente que he tenido. Guillermo.
Me había conectado con él por las redes sociales y en ellas, nos conectábamos para que me diga consejos, novedades, historias...
En fin, que allí estaba junto a un amigo suyo para que le retrate. Se ve que Guille le había hablado de mí y él quería hacerse un retrato. Yo se lo hice, y seguidamente, al ver que yo había mejorado bastante, Guillermo me dijo que le retratara de nuevo. Este me salió muchísimo mejor, y ellos se marcharon muy felices después de que Guillermo me dijera que mañana iba a traer a Joe, otro amigo para que le retrate. Cuando se fueron, la chica que me dijo que iba a venir me dijo que no podía, pero que se lo iba a hacer otro día.
Así que, hoy ha sido un gran día y, mirando hacia delante, creo que mañana va a ser aún mejor, porque viene Guille, Joe y la pareja que tengo reservada como mínimo, claro.
